El Pilates es un método que trabaja todo el cuerpo como un ente completo, aportando beneficios tanto a nivel físico como mental. Te damos algunas razones por las que va a beneficiarte practicarlo a menudo:
- Previene lesiones y ayuda a acelerar la recuperación
- Corrige la postura de nuestro cuerpo
- Fortalece la musculatura
- Te aporta flexibilidad
- Reduce el estrés
- Ayuda a controlar mejor tu respiración
En concreto, queremos centrar estos aportes positivos en las personas que padecen dolores de espalda. El primer aspecto que no puedes dejar pasar es la corrección postural:
Pasamos mucho tiempo realizando posturas inadecuadas, la forma de sentarnos es una de las más habituales, ya que inconscientemente nuestro cuerpo se adapta a una forma que, debido a diferentes desequilibrios musculo-esqueléticos, nos resulta cómoda aun siendo inadecuada para nuestra columna vertebral.
El Pilates te ayuda a ser más consciente de la posición de tu cuerpo en el espacio y a corregir las malas posturas. Con ello conseguirás una postura corporal correcta y fisiológica. Practicando Pilates asiduamente conseguirás posicionar tu columna de forma alineada y evitarás dolores como la ciática.
Otro punto clave de la práctica de Pilates para los dolores de espalda es que fortalece los músculos. Como es un deporte que trabaja todo el cuerpo, nuestros músculos se fortalecerán al completo. El Pilates trabaja de forma específica los músculos estabilizadores del cuerpo, encargados de soportar nuestra postura durante todo el día, además de los músculos movilizadores que se trabajan con otros muchos tipos de ejercicios. Los beneficios serán importantes: mejoraremos la postura gracias a una mayor conciencia de la alineación corporal así como a un fortalecimiento de la musculaturaestabilizadora, evitaremos tender a encorvarnos, daremos una mayor movilidad a nuestras articulaciones y una mayor flexibilidad a nuestros músculos, y evitaremos contracturas musculares.
Si has tenido la oportunidad de hacer Pilates o te han hablado de ello, sabrás que, para una realización correcta de los ejercicios, la respiración es fundamental. Esto te ayudará a concentrarte y te relajarás conectando con todas las partes de tu cuerpo. ¿Lo mejor? Reducirás notablemente tus dolores de espalda.
Un último aporte: si aún no padeces dolores de espalda no pienses que el Pilates no es para ti, pues es un deporte con un gran efecto preventivo. Si comienzas con el Pilates y consigues desarrollar las capacidades que hemos mencionado, será un gran seguro a largo plazo para evitar dolores de espalda.
No esperes a tener dolores de espalda para ponerte a ello. ¡Prevenir es mejor que curar!